CLAUDIA PIRAN: NUESTRA PROPUESTA ES INALTERABLE Y ESTAMOS DISPUESTOS A SEGUIR PELEÁNDOLA
             Por: Carlos Arancibia

-Esta nota estaba propuesta al director de la revista De mis pagos desde el mes de noviembre por considerar a Claudia Pirán una de las cantoras populares de indiscutible condición vocal dentro de nuestro geografía musical folklórica.

Lejos todavía estaban las campanas al aire, los aplausos multitudinarios, los grandes medios, las luces del escenario del Festival Nacional de Folklore distinguiéndola con el premio “Consagración 2005”.

La primera presentación de su propuesta musical la realicé allá por el año 1998 en el escenario de la Peña Don Ata en Cosquín, por donde desfilaron los sueños de muchos cantores de diferentes lugares de nuestro país. Ella no venía sola. Traía en sus alforjas un cancionero donde sobresalía la obra de Gustavo “Cuchi” Leguizamón, Don Buenaventura Luna o Armando Tejada Gómez, Castilla por nombrar algunos.

Habiendo ganado ese año el rubro solista vocal femenina de folklore en la final del Pre-Cosquín de San Juan pudo desplegar su arte en el escenario mayor. Su provincia festejó su vuelta con diferentes invitaciones a los más importantes festivales.

Cuando Silvia Majul me invitó a presentarla el año pasado en el exitoso ciclo ”Mujeres argentina hoy” que se realizó en el bar Tuñón de nuestra capital no dudé en hacerlo con las palabras de Antonio Esteban Agüero”-No me gustan que las mujeres parezcan mujeres. Me gustan que parezcan la música y el viento, me gustan que parezcan la alondra que incendia con su canto la soledad del alma y el silencio del bosque, así decía el poeta. Así la presento a Claudia Piran quien ostentando la galanura de su canto en esta húmeda noche capitalina echará palomas al viento para dejar en el latido rumoroso de su vuelo su propio vuelo”

Y ella menuda, con el cabello largo y su flequillo lloviéndole en la frente y la sonrisa ancha esperaba entre bambalinas, los ojos brillantes como retazos de sol de su San Juan.

-Cuando afirmas desde el título de tu material discográfico “Hay un pueblo, mi pueblo” ¿Cómo es tu pueblo?

- Trabajador, devoto, fervorosamente amigo del canto….ya que San Juan es hermoso y tranquilo para vivir. Hace mucho tiempo que se merece volver a tener un lugar dentro del folklore. Lo estamos buscando entre los grupos que trabajamos en la provincia. Sin mezquindades. Que uno llegue, no importa cual sea. Hemos tenido la gracia de se nosotros los que vamos conquistando un poco más el país que otros comprovincianos. Tal cual lo describe el tema de Hugo Figueroa San Juan es lugar de aromas, de gente de trabajo, de pan, de siestas, de sauces, de brazos de cerros y plegaria ancestral.

-Desde que llegaste a Cosquín en una moto y sacaste el primer demo en la peña de los Coplanacu ¿Qué ha cambiado en la propuesta de esa recién llegada y esta Claudia que ya ha presentado su tercer material discográfico?

-Nada cambió, en cuanto todo lo hago convencida que todo es posible cuando uno tiene ganas de trabajar. A veces se comienza a creer que es muy fácil o imposible. No hay puntos medios. Si crees lo primero te sentás en los laureles y el día menos pensado te caes de la palmera. Recién en ese momento te das cuenta que no es fácil. Y si crees que es imposible te vas a sentir incapaz. Creo que en ese sentido hemos ido cambiando en muchas cosas. Fuimos capaces de creer en lo que podíamos dar, tratando de hacer las cosas paso a paso y seriamente. Una va cosechando de la gente y ellos son los que marcan el camino. Y cambió todo en el ir creciendo con el convencimiento mayor de que algún día podemos llegar a vivir de esto tranquilamente. No te digo famosos porque no es la meta.

-¿Cuál es?

-Poder llegar a todos los lugares que querríamos estar en todo el país y hoy no es posible, ni en material discográfico ni personalmente.

-Más allá de la renovación que vas realizando en cada disco de compositores. ¿La propuesta sigue dentro de la misma línea?

-Sí. Salvo algunos gustos que nos damos dentro de los discos o en la propuesta del escenario, pero siguiendo una línea de contenido con toda la carga que brinda el tiempo, la experiencia de ir tratando de mejorar cada día, en ir descubriéndonos. Pero sin tergiversarla…no se puede cambiar algo que viene de tan hondo, eso nos pasa a nosotros y hablo en plural porque los músicos trabajan en la parte que les corresponde y yo en lo vocal. Y nos nace desde lo más profundo de nuestro corazón. Ahí es donde está la clave de esa estabilidad entre comillas: en la propuesta, en lo que vamos dejando, por supuesto sin variar la esencia. Esa no se toca.

-¿Cuesta en estos tiempos de degolladores de silencio por usar una frase que no me pertenece que la propuesta tuya sea bien recibida?

-Cuesta como todo. No creo que el problema sea la propuesta. Es que estamos muy aturdidos, muy temerosos de todo. A nosotros nos pasa que dudamos 48.567 veces el tema que vamos a interpretar en el escenario. También pasa en la parte económica cuando no sabemos hasta último momento si podemos llegar a un festival o no. Siempre va con lo justo. Nadie invierte en nada entonces nadie espera nada. No solo Claudia Pirán no puede surgir, hay muchos y creo no equivocarme con lo que te voy a decir que hace un largo par de años que no surge nadie y cuando lo hace es una cosa muy tibiecita, muy a ver que pasa, pero a lo grande, tirando manteca al techo no he visto… Yo creo que debemos hacer el aguante al país, al público. Nosotros sabemos que en San Juan hay mucha gente que quiere ir a vernos pero no puede pagar una entrada que nunca sube de $5, entonces hay que esperar. Nuestra propuesta es inalterable y estamos decididos a seguirla peleando.

-Contame quienes son los músicos que te acompañan y como los fuiste integrando al grupo.

-Alejandro Sánchez, mi guitarrista además de director general del grupo es el encargado de poner orden. Fue el primero que llamé y se enganchó con la idea. Recuerdo que en la primera reunión planteamos la idea de la continuidad, más allá de los resultados del pre-Cosquín. Ganando o perdiendo que siguiera la propuesta. Antes teníamos un percusionista un poco difícil porque primero estaba su siesta, una institución en la provincia, y para nosotros el único momento libre para los ensayos era justamente….la siesta. Nos complicaba mucho, entonces llamamos a Carlos Cruz, (ex integrante del grupo Siesta, que en el 97 salió revelación del Pre-Cosquín instrumental) quien reunía dos condiciones fundamentales. Además de ser un excelente percusionista, toca muy bien el teclado, así que cuando proponemos un tema con ese requerimiento él lo hace. Después llegó Tito Medina, una gran referencia dentro del folklore sanjuanino, según su decir nacido en Tucumán, criado en Santiago del Estero y malcriado en San Juan, esa es la cronología de su vida. Es bajista y guitarrista, y se turnan con Carlos, cuando él está como tecladista le hace la percusión.La última en entrar al grupo desde 1999 es María Fernández. Además de ser amiga, forma parte de la resistencia, porque estaban envalentonados en la cifra de 4 a 1, era mucho, siempre eran dueños de la razón… (Se ríe abiertamente) Excelente música, virtuosísima, reconocida en todo San Juan. Ha hecho conciertos con la Sinfónica de la provincia, que no es poco cuando se tienen 20 años. Todos en lo musical son muy confiables, trabajan mucho lo que creen.

-¿Qué debe reunir el autor de una canción para ser elegido en tu repertorio?

-Al cantarla debo sentir la vibración de la tierra dentro de mí. Un paisaje pintado en la emoción del hombre, en la pertenencia a su tierra y sus ancestros, un río de sueños inundándole el alma.

Y vuelve al escenario reclamada por su público. Tan sanjuanina como el zonda, una risa límpida como los arroyos que surcan su provincia, dueña de una voz que se derrama como el sol sobre las viñas, jubilosa siempre, como el tañido de una campana vibrando en el valle.

 

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